sábado, 19 de marzo de 2011

Last breath

Dame el último y más desesperado aliento. Aunque me ahogue, quiero desvanecerme sabiendo que te tengo. Quiero vivir en tu atmósfera, quiero respirar tu mismo aire. Que sabes de sobra que si tu estás cerca los latidos se detienen, que cuando no estás no existen las constantes de mi corazón. No se trata de sobrevivir tan solo, se trata de que me regales tu vida, quiero entregarme entera a ella. Porque quiero llenar días de ella con mis besos, quiero marcar una línea del tiempo para ti y para mi.

Por eso ahora, dame tu aire, entiende que ahora mismo solo puedo inhalar tu cuerpo, que ya no hay otro que me haga vibrar, que ningún otro sabe hacerme revivir con una mirada, que no hay más que cruzar dos palabras para saber que lo tengo todo, y un silencio para caer al abismo. Dame tu mejor momento, tus días nuevos llenos de vida. Podría bailar al son de cualquier lamento, pero nunca permitiría la pérdida de ese sentimiento en el que te convertiste.

Últimamente no quiero cerrar los ojos, no quiero dormir, mi cuerpo no descansa al saber que cuando amanezca seguiré alejada de ti, seguiré en la desesperada carrera del simple transcurrir de las circunstancias.


Impaciente, necesito respirar. Sin demora alguna quiero tenerte por última vez, quiero que vuelvas a mi, como una flor en su estación de mayor esplendor, quiero que seas mi primavera para llenar tus días de mi inolvidable olor.